Los
tetes eran la clase social más baja de los ciudadanos en la antigua
Grecia. En Atenas había cuatro niveles de ciudadanos según su poder
económico y derechos. En cuarto y último lugar estaban a los tetes.
No poseían tierras propias y aunque
podían votar no tenían opción de ser elegidos a cargos públicos. En
época de guerra, los ciudadanos debían formar el ejército de sus polis.
Los que tenían suficiente poder económico para costearse el equipamiento
servían en la infantería como ‘hoplitas’, pero nuestros tetes, que no
podían permitirse este material, debían servir de remeros en los barcos
de guerra, formando la mayoría de la marinería de las famosas trirremes de Atenas. Estos barcos dominaron las batallas navales para Atenas frente a sus enemigos, los persas en las guerras médicas o los espartanos en las guerras del Peloponeso.